martes, 19 de junio de 2018

Joe Bonamassa - "Blues of Desperation"

Nuestro Odín - Pere Ll. Mataró


Odín, es considerado el dios principal de la mitología nórdica y algunas religiones etenas. 

Es el dios de la sabiduría, la guerra y la muerte. Pero también se le considera, aunque en menor medida, el dios de la magia, la poesía, la profecía, la victoria y la caza... 

Nuestro Odín, era solo un gato, nuestro viejo gato, delgado como un saco de huesos, de pelo rojizo, nuestro bichito consentido, mimado y querido. Ya no estará esperando al abrir la puerta para recibir a los que adoptó como su familia, su maullido no sonará cuando nos sentemos a comer, pidiendo su parte del menú, y no veremos su sombra lángida por los pasillos de la casa. 

Nuestro gato no hablaba nuestro lenguaje, pero se hacia entender, era uno más del clan, un amigo peludo, mimoso al que le encantaban nuestras caricias y dormir enroscado a los pies de la cama. No le gustaba estar solo, quería estar siempre con los suyos, y cuando había visitas, no estaba para presentaciones, se iba a la cama y no había gato hasta que los invitados marchaban de casa. 

Nuestro viejo gato de mirada triste, de andares destartalados y de aspecto lánguido nos ha dejado, suavemente, sin sufrir y en silencio, como el se movía por casa. 

Lo echaremos de menos, queriendo creer que ahora está en un mejor lugar, quizás, en el palacio de Valaskjálf, la gran morada construida y techada con plata pura en el Asgard, Enroscado en el trono del Dios Odín, desde el cual se puede ver todo el universo, y si es así, seguro que vela por nosotros, porque se ha sentido querido, muy querido... 

El gato que está en la oscuridad, sabe que en mi alma... Una lágrima Hay

lunes, 18 de junio de 2018

The Pan Within -The Waterboys

Sálvame - Pere Ll. Mataró Sánchez

Salte al vacío
antes de que se derrumbara el puente donde
apoyaban mis pies,
fue el preciso momento en que vi el paisaje estático
convertirse en polvo,
no pudiendo hacer la foto para colgarla en instagram...

Todo fue demasiado rápido,
toda mi vida ha pasado muy rápido,
unas pocas melodías como banda sonora
que grabe en ti,
quedando atrapado aquí, por siempre,
entre dos paredes sin salida y sin apenas aire para respirar.

Me regocije en ti,
entre sabanas y risas, entre sueños de besos de amante,
envueltos en nuestros brazos,
hasta que desperté escondido entre sombras devoradas por la oscuridad.

Quise nadar contigo en el río
antes de la inundación,
cuando el agua aún no estaba desbordada
y las orillas eran claras.

Persigue mis pasos y encuentrame de nuevo,
quizás este en el color oculto del arco iris,
en la cara B de aquel disco de blues,
o en algún pliegue de las sabanas de aquel nido,
nuestro nido.

Sigo durmiendo en tu sueño
donde el apocalipsis aún no ha llegado,
siendo destello entre las grietas de un muro frío y gris,
soy una foto desenfocada a punto de ser desechada,
una sonrisa rota en una noche de cielo oscuro y hermético.

Por favor, no te rindas de mi,
no dejes que muera el recuerdo,
no dejes que todo haya sido en vano,
creo que estoy loco
y siempre estaré enfrentado al mundo,
pero no te rindas de mi,
búscame y encuentrame otra vez.

Corre detrás de tus miedos
y no te des por vencida,
cariño sálvame otra vez...

Sálvame una última vez,
antes de que desaparezca entre los que me quieren cuerdo.

martes, 12 de junio de 2018

Rolling Stones - Wild Horses

Destello fugaz - Pere Ll. Mataró

Miro alrededor, hasta donde me permite el esfuerzo de mi mirada, allí donde todo se convierte en borrosa niebla. 

Busco las palabras al viento, las mismas verdades que libere esa tarde en que descubrí mi punto débil en tu punto fuerte. 

Miro y busco en ese pliegue en el tiempo donde no temía cambiar las normas, donde decía, sin dudar, lo que pensaba, donde solo temía ser envuelto en tu abrazo por la espalda, porque sabia que caería prisionero, sabia que con tu roce me engancharía rápido... 

El negro cubrió el blanco y ahora sé que no hay ni un sitio para ti en esta negrura hambrienta y menos para mi, que vivo en el destierro de las almas. 

Todo está reservado en este paraje de recuerdos donde sigo columpiándome en aquella tarde que descubrí que al dejarte empezaría a perderme.