a través del cristal,
mientras pensativo observaba
el romper de las gotas en la piedra.
Llovía
fragmentos de mi mente
desde el recuerdo distante
de cualquier orilla,
de cualquier cielo.
Llovía
y el eco de cada gota
resonaba en los miedos guardados
en la profundidad del alma.
Llovía
mientras la vida se trenzaba
entre furias, frustraciones y silencios
y la oscuridad brotaba de modo
extraño del cielo a la tierra
húmeda y sin huellas.
Llovía
mientras el reflejo del fragmento
me descubría mi debilidad,
la debilidad de la sombra
de mi cuerpo prestado.
Llovía...
mientras el reflejo del fragmento
me descubría mi debilidad,
la debilidad de la sombra
de mi cuerpo prestado.
Llovía...
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