con persistentes cóleras desbordadas
en agónicos compases de miseria.
Desiertos interminables,
sin orillas, sin murmullos
repletos de cenizas de los que callaron
por miedo a abrir la boca.
Cielo rojo intenso
fin de los tiempos
donde la luz cegadora se desploma
entre estériles razones.
Pensamientos resecos
donde se deshacen los sueños
en el abrazo ardiente
de una soledad sedienta.
El mundo se apaga
en infinita oscuridad
donde yacen ocultos
los nonatos y los desterrados
en locuras hechas ceniza.
El rencor prevalece
en mares de gigantes olas,
donde espumas pétreas
machacan mis huesos delirantes
al unísono que mis pulmones arden
dentro del aire hueco
donde arde el tiempo.
El mundo se funde en este tiempo
donde la soledad devora esperanzas
y se secan los labios faltos del beso
entre llamas sin fuego,
entre ardores sin llama
en este mundo sombrío
en este mundo que se acaba.
donde arde el tiempo.
El mundo se funde en este tiempo
donde la soledad devora esperanzas
y se secan los labios faltos del beso
entre llamas sin fuego,
entre ardores sin llama
en este mundo sombrío
en este mundo que se acaba.
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